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Tres asaltantes han suplicado por su vida tras fallidos asaltos a combis en México
La población mexicana parece haber llegado a su límite con los asaltantes de transporte público que desde hace unos días han venido siento sometidos tras intentos fallidos de atacarlos.
En las últimas horas las redes sociales de ese país se han visto inundadas con videos de delincuentes suplicando por su vida.
En una de las grabaciones se aprecia como el delincuente es sometido por personas que le exigían el nombre de sus compinches.
El ladrón no proporcionó ningún dato por lo que siguió recibiendo golpes de los usuarios, y a pesar de que les rogaba que ya lo dejaran.
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— Qué Poca Madre (@QuePocaMadreMex) August 15, 2020
Pasajeros, hartos de la inseguridad que a diario viven, golpearon a un asaltante de transporte público, a la altura del semáforo del Chedraui de Ojo de Agua en #Tecámac. #Edomex pic.twitter.com/Ns9HWlTFyZ
En otro video, un asaltante fue tundido a golpes y desvestido por los usuarios que lo dejaron únicamente en calzoncillos.
Los usuarios se enfrentaron a los hampones y capturaron a uno de ellos, quien responde al nombre de Cristian, de 28 años de edad.
Su cómplice, quien iba armado, al observar que su compañero era golpeado se bajó y huyó, perdiéndose entre las calles. La paliza se prolongó por 15 minutos, mientras llegaban a la estación policial para entregarlo.
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— Qué Poca Madre (@QuePocaMadreMex) August 16, 2020
Cansados de sus maldades, ususarios ATRAPAN a #RATA de #Nezahualcóyotl durante ASALTO a transporte público. El MALANDRO fue ENTREGADO a policías @SSC_CDMX del paradero Pantitlán en #CDMX. pic.twitter.com/qDntC9xp6d
En el tercer video puede verse a un hombre tirado en el pavimento en donde recibe constantes patadas por todo el cuerpo e insultos de los usuarios de una unidad de transporte que le reclaman su proceder, y lo interrogan sobre el paradero de sus cómplices que lograron escapar.
El hombre implora que ya no le peguen y les asegura que era la primera vez que intentaba cometer un asalto a pasajeros del transporte público, mientras se duele de los golpes que le caen en la cabeza, la cara, las costillas, la espalda y las piernas, al tiempo que dos personas lo despojan de sus tenis y rompen su pantalón.