A dos años de haber sido asesinada con lujo de barbarie, el caso de la joven Jocelyn Milena Abarca Juárez sigue impune y su familia reclama que le caiga todo el peso de la ley al supuesto asesino.

Este miércoles, Ronald Atilio Urbina Velásquez, de 35 años, regresó  al banquillo de los acusados para enfrentar la audiencia preliminar en la que se decidió que enfrentará juicio por el caso.

La familia de Abarca está preocupada ya que el imputado podría quedar en libertad por ley, debido a que no ha recibido sentencia por el proceso judicial que lo tiene en prisión desde hace dos años.

Amigos, familiares y activistas en favor de los derechos de la mujer llegaron a la sede judicial para exigir justicia por el femicidio que conmocionó a todo el país.

Según las investigaciones, la joven fue atacada por su compañero de vida cuando le planteó que se quería separar de él tras diez años de relación.

El imputado habría asesinado a su compañera de vida y convivido con el cadáver unos días hasta que la cortó en pedazos y lanzó en cubetas las partes del cuerpo.

El sujeto fue identificado mediante el sistema de videovigilancia y capturado cuando era citado para reconocer el cuerpo en las instalaciones de Medicina Legal.

Urbina trató de mantener oculto el hecho e incluso se hizo pasar por Jocelyn en una conversación que tuvo con la madre de la joven vía WhatsApp.

En caso de no realizarse la audiencia preliminar, el tiempo comenzaría a jugar a favor del imputado ya que este debe de ser procesado por completo antes del 15 de julio del presente año, de lo contrario continuará sometido al proceso pero en libertad bajo medidas.