Una familia de La Unión, pero residentes en San Miguel, se mantiene en la incertidumbre debido a una posible equivocación del personal del hospital San Juan de Dios de San Miguel en la entrega del cadáver de su madre.

Según una publicación del periódico El Diario de Hoy, el pasado 24 de junio la familia Alvarez recibió la trágica noticia que su ser querido había fallecido producto de la covid-19.

El protocolo establecido impidió que la familia reconociera el cadáver que fue enterrado ese mismo día en un cementerio privado en el municipio de Conchagua, La Unión.

La familia se disponía a preparar el novenario de su madre cuando una llamada del personal del nosocomio cambió todo.

En la conversación telefónica, la familia fue notificada que el cuerpo de su madre se encontraba en la morgue y que tenían que retirarlo. 

Este día, la familia anunció que va a proceder a interponer una denuncia ante la Fiscalía General de la República y Procuraduría de Derechos Humanos (PDDHH) para que se esclarezca el caso.

La petición señala que se exhumen los restos de la mujer que fue enterrada en un cementerio de Conchagua para aclarar dudas.